La Real Academia de Medicina y Cirugía de Sevilla (RAMSE) ha inaugurado este jueves, 30 de enero, su 325 Curso Académico. El acto, que cuenta con la aceptación de la presidencia de Honor de S.M. la Reina Doña Letizia, ha estado presidido por el Excmo. Sr. presidente de la RAMSE, Dr. D. Carlos Infantes Alcón, acompañado por la Excma. Sra. Dña. Patricia del Pozo Fernández, consejera de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía.

La jornada ha comenzado con la inauguración del Vestíbulo Real, con el mecenazgo de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla, situado en la entrada de la sede de la RAMSE. El vestíbulo cuenta con retratos del rey Alfonso XII y la reina María de las Mercedes (Wssel de Guimbarda, 1878); retrato del rey Carlos III (Atribuido a Guiseppe Bonito, 1775); retrato de D. Joseph de Cervi, presidente perpetuo de la Regia Sociedad Hispalense desde 1729 (Andrés Rovira, 1735); y retrato de D. Javier Lasso de la Vega y Chinchón (Manuel Cabral y Aguado Bejarano, 1886).

A continuación, se ha dado lectura de las Memorias Académicas 2024, por parte del secretario de la RAMSE, el Dr. Federico Argüelles Martínez. Posteriormente, se ha hecho entrega de los Premios del Concurso Científico de 2024 de la RAMSE.

 

Discurso inaugural

El Académico de Número, especialista en radiología, el Dr. Juan Sabaté Díaz, ha sido el encargado de impartir el discurso protocolario inaugural del curso titulado: “El Santoral y la Medicina”. Sabaté ha realizado un recorrido por la evidencia de que “la Academia es una institución médica, pero son innegables las influencias de la religión católica en su seno”, durante su intervención ha reconocido que “como médico, la fe debe ser un estímulo para buscar sinceramente la verdad”. Al hacer referencia a las creencias de los pacientes, asegura que “creer en Dios, puede ayudar al enfermo y ser de utilidad en el ejercicio de la medicina, pero sin perder la perspectiva científica. Ya que sabemos a ciencia cierta, que los antibióticos y las vacunas, ayudan tanto a los que tiene fe como a los que no”.

Además, ha añadido que “debemos ser precavidos, ya que estamos frente a curaciones inexplicadas, la mayoría de las veces que, ocasionalmente a posteriori han podido ser entendidas. El mismo hecho para un creyente puede ser un milagro, para un escéptico una inadecuada interpretación de los síntomas, y para un nihilista, nada ocurrió y todo fue fruto de la imaginación”.

 

Consejera de Cultura y Deporte

Por su parte, la consejera de Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, Patricia del Pozo, ha resaltado la labor científica y también el trabajo de difusión de la largamente Real Academia de Medicina y Cirugía de Sevilla, a la sazón la más antigua de España y una de primeras del mundo en su género, además de poseedora de una de las mejores bibliotecas históricas sobre historia de la medicina. Una labor a la que a partir de hoy se suma el nuevo espacio para acoger, “su ejemplar colección de pinturas que pone de manifiesto su rica historia tricentenaria”.

Asimismo, Del Pozo, ha felicitado a todos los galardonados en esta edición de los premios científicos que concede anualmente la institución. “Gracias por investigar y por curar. Por hacer avanzar el conocimiento y dar respuesta a los problemas y desafíos que nos plantean diariamente los problemas de salud”, ha concluido.

 

Presidente de la RAMSE

Asimismo, el presidente de la RAMSE, el Dr. Carlos A. Infantes, encargado de clausurar el acto, ha afirmado que “todos los miembros de esta Real Academia y, en general, todos los médicos, tenemos un entrenamiento basado en la aplicación de la ciencia al objeto de contribuir a sanar físicamente a nuestros pacientes. Pero todos, también como médicos con vocación, elegimos una profesión por una tendencia natural al pretender ayudar también el aspecto humano del enfermo”. Y ha añadido que “manejemos nuestros conocimientos técnicos para valorar la enfermedad del paciente, pero en nuestra exposición externa, creamos o no, tengamos fe o no, debemos transmitir hacia el paciente el convencimiento de que lo importante es él como ser humano y que sus creencias son siempre respetadas y valoradas positivamente”.